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Mi maestro pulpo, un documental sobre la amistad inter-especie

Escrito por Sol Marco

Esta es una historia de amistad, o más bien una historia de amor documentada bajo las aguas.

Mi maestro pulpo (Un documental de Netflix, 2020) narra la relación amorosa que se establece entre una persona y un pulpo, uno de los seres más inteligentes que vive sobre el planeta y, a su vez, con un ADN muy distanciado al de los humanos.

El cineasta Craig Foster después de una crisis existencial baja a bucear todos los días entre las algas en los arrecifes y el bosque submarino de Sudáfrica a observar el océano. En medio de estas inmersiones se encuentra con un pulpo.

Este documental muestra la historia entre un humano y un pulpo. Una historia que parece fantasiosa pero es real. Con una fotografía e imágenes muy coloridas y registros subacuáticos maravillosos que solo una persona muy dedicada a la tarea puede lograr. Además del pulpo se muestran una variedad de flora y fauna que nos acerca a un mundo del que no estamos familiarizados y es imposible para muchos ver todos los días. Nos lleva por un camino imaginario de la mano de un pulpo muy juguetón.

Craig Foster estaba pasando un mal momento en su trabajo, ya no encontraba motivación y empezó a meterse en aguas gélidas. Esto lo llevó a volver a utilizar la cámara y tomar imágenes. Todo comenzó el día que conoció a un pulpo hembra. Los primeros días el agua estaba muy fría, pero luego de varios días el cuerpo se fue acostumbrando, tanto que empezaba a anhelar el frío.

Empezó a ir todos los días a observar el mismo lugar “porque esa es la única manera de observar el océano”. Cuando encontró a esta “pulpa” decidió que iba a ir acercándose todos los días de a poco. Al principio solo dejaba la cámara y ella se acercaba detrás de un caracol como escudo. Hasta que terminaba por tirar la cámara al piso. “Un pulpo es, básicamente, un caracol que perdió su caparazón en la evolución”.

El día número 52 lo estaba siguiendo ella a él y se le cae uno de los lentes al piso. Eso la asustó mucho y se alejó con mucho miedo. Después de ese episodio la buscó durante días hasta que empezó a pensar como un pulpo. Después de estar buscándola día tras día durante una semana, la encontró. Sintió que el pulpo confiaba en él y lo dejaba entrar en su mundo de pulpo porque subió a la superficie sobre su mano. “Cuando tenés esa conexión con un animal y vivís esas experiencias, es alucinante”.

Otro día, por el 125, un tiburón le quita un tentáculo al pulpo, si bien Craig estaba yendo todos los días a visitar a su amiga decide no intervenir cuando la vienen a atacar. Después de muchos días de recuperación, el tentáculo le vuelve a crecer. Esa capacidad para regenerarse es única e increíble. Se mantuvo quieta en su cueva en un color blanco sin moverse hasta que estuvo mejor. Por la conexión con este fantástico animal, el cineasta sintió que lo que le había pasado a ella le había pasado a él.  

El nombre científico del pulpo es Octopus Vulgaris y tiene 2000 ventosas, y las usa de forma independiente. La película despliega la maravilla de este animal, su maravilloso comportamiento de camuflaje y la gran variedad de colores en los que un “pulpo común” cambia. También, utiliza las diferentes conchas de mar adhiriéndolas a su cuerpo. Se esconde en cuevas y se enrolla en algas.

Día 304 el pulpo hembra juega con los peces, extiende sus largos tentáculos como brazos hacia la superficie y hace que los peces se muevan de un lado hacia el otro. Es “Un animal muy frágil, líquido y blando que depende de una inteligencia tremenda. Tiene que aprender rápido, porque solo viven poco más de un año.”

Por el día 324 la encuentra junto con otro pulpo, es muy raro encontrarlo. Sabía que no iba a volver a verla después del apareamiento porque ella se moriría poco después de nacidas las crías. Y así fue como los peces picotearon sus restos y los tiburones se llevaron su cuerpo. A esta altura, si bien la muerte le generó tristeza, también sintió alivio que ella se fuera, ya se sentía obligado a ir todos los días a visitarla. Unos días después encontró pequeños pulpos y le gustaría pensar que son de ella. Hoy en día sigue buceando, pero no va solo, va con otras personas que comparten su curiosidad. Lo que le enseñó es que: “Sos parte de este lugar, no un visitante.”

Mi maestro pulpo es el mejor documental que vi en mucho tiempo, tiene momentos emotivos, graciosos, tristes, como la vida misma. Es una relación maravillosa la que se forma y es increíble tener acceso a poder verla ya que se construye cómo se va formando la relación desde el comienzo hasta el final. El resultado es aprender sobre pulpos, sobre el océano y sus criaturas. Una experiencia increíble, que nos pone en contacto con lo salvaje, nos saca por un momento de nuestras rutinas domesticadas y nos vuelve un poco más empáticxs hacia otras especies.

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