La película empieza en un convento en Bobbio, Italia en el pasado (en Internet encontré que en el s. XVII pero más que en un siglo específico, ésta primera parte de la película transcurre en un momento histórico donde la Iglesia tiene poder absoluto sobre la vida de las personas). Llega al convento Federico, una especie de D’Artagnan compungido, a manejar el tema de la muerte de su hermano cura suicida: Fabrizio.
Para la Iglesia católica la muerte por suicidio implica no estar en estado de gracia, por eso necesitan que la amante de Fabrizio, Benedetta confiese haber hecho un pacto con el diablo y que esto haya llevado a la muerte a Fabrizio y no su propia voluntad. Para que Bene confiese le hacen superar una serie de pruebas (lo más interesante de la película): la tiran al agua con cadenas, si su cuerpo se eleva contra natura, es prueba del pacto, si se muere… y bueno, esta redimida y va al cielo. Y así, hasta que la sepultan en vida en un cubículo de ladrillos.
Corte al presente: en el mismo convento ahora vive un vampiro muy viejo y acabado que va al dentista en lo que es la otra escena divertida/interesante de la película. Federico (el mismo Federico de antes) es en este momento un gestor chanta que quiere estafar a un ruso millonario vendiéndole el convento en cuestión. Después se siguen escenas donde el vampiro deambula, hay un par de locos, personajes que salen de andá a saber dónde y un final: el vampiro se muere. La película no termina ahí (con Mati nos mirábamos “¿¡Sigue?!”). Hay un epilogo en el cual un Federico cardenal ya viejo vuelve al convento a canonizar a Benedetta que sigue viva y ensangrentada (¿?) en su cubículo. Cuando la liberan ella sale joven, desnuda y con un brushing muy extraño y su visión causa la muerte del cardenal. Todo muy sobrenatural, al ritmo de un cover de Nothing really matters de Metallica realizado por un coro.
Como si fuera poco, el epílogo le da la razón a los curas inquisidores: Benedetta era efectivamente una amiga del diablo, por lo cual si algunas partes del proceso referencian a la Juana de Arco de Dreyer esta referencia pierde automáticamente todo su poder crítico cuando termina la película. Que una película tenga referencias y las podamos identificar es muy divertido para el que las encuentra, ¿no? Bueno, cope. ¿POR QUÉ están las referencias? ¿QUÉ referencian? Que estén y que las veamos no es suficiente. (Que alguien por favor le diga esto a los chicos de Stranger Things).Que una película intente ir en contra de las reglas narrativas clásicas/comunes esta buenísimo. Que una película sea arbitraria también es interesante. Pero no nos dejemos engañar, Sangre de sangre es una especie de ensayo tímido en este tipo de cuestiones, no es audaz ni compleja, ni una proeza técnica ni una belleza. Es lo que es. Con Mati nos aburrimos.
Una pelicula de accion sin adornos y que muy sutilmente lanza un par de comentarios agudos sobre los aspectos mas absurdos de la cultura norteamericana.